lunes, 10 de septiembre de 2007

El Alacran; Una reflexion

EL ALACRÁN

UNA REFLEXION QUE NECESITAMOS,CUANDO NOS DESILUSIONAMOS DE LA RESPUESTA DE LOS DEMAS.

Un maestro oriental vio cómo un alacrán se estaba ahogando, y decidió sacarlo del agua, pero cuando lo hizo, el alacrán lo picó. Por la reacción al dolor, el maestro lo soltó y el animal cayó al agua y de nuevo estaba ahogándose. El maestro intentó sacarlo otra vez y otra vez el alacrán lo picó.

Alguien que había observado todo, se acercó al maestro y le dijo: “Perdone maestro, ¡pero usted es terco! ¿No entiende que cada vez que intente sacarlo del agua el alacrán lo picará?”. El maestro respondió: “La naturaleza del alacrán es picar, el no va a cambiar su naturaleza y eso no va a cambiar la mía, que es ayudar y servir”. Y entonces ayudándose de una hoja, el maestro sacó al animalito del agua y le salvó la vida.

REFLEXIONES


No cambies tu naturaleza si alguien te hace daño, sólo toma precauciones.


Algunos buscan la felicidad, otros la rechazan. No olvides esto.

No permitas jamás que la conducta de otras personas condicionen la tuya. Sencillo, ¿no crees?

Cuando la vida te presente mil razones para llorar, muéstrale que tienes mil y una razones por las cuales sonreír”.

Recuerda: que si te ha dolido alguna vez el alma, es porque Dios, te he agarrado demasiado fuerte para que no caigas.

EL ALACRÁN




sábado, 8 de septiembre de 2007

Articulo de Fausto Maso

El Gobierno sabe contar: son millones Fausto Masó
El Gobierno se cura en salud con los estudiantes. Los acusa de burguesitos güarimberos, arremete contra los rectores París y Ugalde, jura que los dirigentes estudiantiles no saben ni hablar. Mentira. El Gobierno está chorreado. El Gobierno sabe contar. Este movimiento representa a 80 universidades y a los liceos de Caracas, por ahora. Abarca desde el Delta a Apuro. Unos 3 millones de estudiantes que en un curioso parlamento debatirán sus decisiones y se están unificando democráticamente. Otra cosa, a cada estudiante viva en Catia o en Chuao, lo respalda papá y mamá. Suma y sigue. Por primera vez parte de los chavistas no acompañan a su líder. No temen perder un pent house en el litoral ni que Chávez les quite a sus hijos, sino les revienta que gobierne hasta el año 2040. Hasta el Defensor del Pueblo anda en campaña a favor de la reforma. Por algo será. Aún así, no hay que jugar posición adelantada, no insistir en lo que divide a la oposición en vez de subrayar lo que la une. Primero hay que ganarse a la opinión pública, incluyendo a esos chavistas molestos. Una manguangua si el discurso se dirige a todo el país y no solamente a los venezolanos cuyos hijos estudian en colegios privados que, además, ya están contra Chávez desde 1999. Hay que ganarse a los que viven en el barrio y les gusta que al Táchira lo gobiernen los tachirenses, no un virrey designado desde Caracas. Invite a su amigo chavista a tomarse unas cervezas. Pregúntele bajito si quiere que Chávez gobierne un cuarto período. Ese pana suyo decidirá el futuro del país, no el puñado de chavistas o antichavistas furibundos. Con constitución y sin constitución, cuando quiera Chávez se apoderara de cualquier fábrica o casona. Miren lo que le pasó a Ávila Mágica. Pretextos siempre ha habido para cometer arbitrariedades aunque, claro, contar con una constitución que las justifique ayuda un poco. Disfrazaron la reforma para distraer a la oposición y disimular el trago amargo para los chavistas: la reelección indefinida y que Monagas quede pintada en la pared. Si la oposición se dedicase estos meses a discutir con Tibisay Lucena, lamentarse por la caída de la inversión extranjera, o el peligro que corren los colegios bilingües, le harán un favor a Chávez. Cuidado también si a última hora en la Asamblea no le agregan alguna palabrita al artículo sobre la propiedad privada para callar a los críticos. A partir del lunes tienen la palabra los estudiantes. Hay más estudiantes que militantes del PSUV. Cuchillo para su pescuezo Acortar la jornada de trabajo a 6 horas disparará la inflación más temprano que tarde y le gustará a todo el mundo. En Venezuela cuesta más producir cualquier cosa que en lugares donde los trabajadores ganan mucho más. No somos finlandeses ni suizos ni suecos. El socialismo petrolero es la apoteosis de un rentismo ineficiente y ruinoso. En vez de disminuir la jornada diaria habría que pasar un millón de empleados públicos a la producción, a las fábricas. Están pidiendo jubilaciones a los 50 años. No hay Seguridad social y quieren asegurar a los buhoneros. El Gobierno no saca cuentas. Ignora que los economistas advierten que a Estados Unidos lo amenaza una posible recesión. Piden laborar seis horas y hacer trabajo voluntario.